Sulfatadoras

Gracias a nuestra pasión por la jardinería y los trabajos forestales y a nuestra dilatada experiencia en el sector, estamos en condiciones de ofrecerte las mejores sulfatadoras. Y, lo que es aún más importante, estamos perfectamente capacitados para asesorarte en el momento de la elección.

A continuación, vamos a tratar de facilitarte todos los detalles que necesitas para elegir tu sulfatadora ideal. Estamos seguros de que será una información muy valiosa para ti, pero, si continúas teniendo alguna pregunta que hacer, seguimos estando ahí para ti. Nuestro equipo está preparado para brindarte asesoramiento especializado y personalizado y es capaz de resolver cualquiera de tus dudas.

Bienvenido a nuestra gran selección de sulfatadoras baratas de elevado rendimiento. En nuestra tienda online vas a poder comprar máquinas de sulfatar manuales, eléctricas o las más potentes, con motor a gasolina. Elige la que más se ajuste a tus necesidades y paga un precio más que justo por una calidad imposible de encontrar fuera de aquí. Tenemos la sulfatadora que necesitas, la que se ajusta tanto a tu bolsillo como a tus necesidades. Te animamos a contactar con nuestros especialistas, que te ofrecerán la mejor pulverizadora para ti, según el uso que le quieras dar.

Cómo debes elegir el mejor pulverizador

Una máquina de sulfatar (denominada indistintamente sulfatadora, fumigadora o pulverizador) es una herramienta indispensable si tienes un terreno y tu objetivo es mantener su salud y belleza inalterables desde el primer día hasta el último. 

Si este es tu caso, sin duda, comprar una sulfatadora es una decisión que tarde o temprano debes tomar. No obstante, ante la inmensa variedad de máquinas de sulfatar que hay en el mercado, es muy probable que no sepas ni por dónde hay que empezar. ¡Tranquilo! Estamos aquí para ayudarte a tomar la mejor decisión.

Gracias a nuestra pasión por la jardinería y los trabajos forestales y a nuestra dilatada experiencia en el sector, estamos en condiciones de ofrecerte las mejores sulfatadoras. Y, lo que es aún más importante, estamos perfectamente capacitados para asesorarte en el momento de la elección.

A continuación, vamos a tratar de facilitarte todos los detalles que necesitas para elegir tu sulfatadora ideal. Estamos seguros de que será una información muy valiosa para ti, pero, si continúas teniendo alguna pregunta que hacer, seguimos estando ahí para ti. Nuestro equipo está preparado para brindarte asesoramiento especializado y personalizado y es capaz de resolver cualquiera de tus dudas.

Tipos de fumigadoras 

Las fumigadoras son máquinas extremadamente útiles para tratar y cuidar las plantas de tu jardín. Su funcionamiento es muy sencillo: se llena su depósito del líquido enriquecido con los nutrientes o productos químicos específicos que necesita tu terreno y este se pulveriza directamente sobre él. 

En pocos minutos y sin apenas esfuerzo, tus plantas estarán protegidas con los insecticidas, herbicidas o fungicidas que requieren para sobrevivir y seguir creciendo en perfectas condiciones. Recuerda que todos estos elementos son imprescindibles para conservar la salud de tu jardín e impedir el nacimiento y la proliferación de malas hierbas.

Existen en la actualidad una gran cantidad de pulverizadores que pueden ayudarte a cumplir estos objetivos, pero todos ellos comparten un denominador común: la capacidad de rociar las plantas con el líquido que hayas preparado a través de una especie de lluvia ligera y controlada.

Ahora bien, ¿qué máquina de fumigar es la ideal para ti? Es el momento de hacer un repaso por los tipos de sulfatadoras que hay disponibles. Este es el primer paso del camino que has de recorrer antes de tomar una decisión. ¿Listo? Te mostramos los tipos de sulfatadoras entre los que vas a tener que elegir:

  • Sulfatadoras eléctricas: funcionan con baterías de litio recargables y son superligeras, silenciosas, económicas y ¡ecológicas! Requieren un mantenimiento mínimo y tienen una relación calidad precio bastante buena.
  • Sulfatadoras de gasolina: se trata de modelos más potentes y eficientes, equipados con motores que pueden ser de 2 o de 4 tiempos. Lo normal es que pesen más que las eléctricas, por eso es habitual que se acompañen de una mochila, para facilitar su manejo.
  • Sulfatadoras manuales: sencillez y todavía más ahorro son las características esenciales de esta clase de máquinas de sulfatar, que se valen de una manivela para comprimir el líquido contenido en el depósito, que se expulsa con la presión necesaria para cubrir grandes distancias. 
  • Sulfatadoras de carretilla: son pulverizadores con motor de gasolina que se han acoplado a una carretilla con ruedas y se han equipado con una manguera de suficiente longitud (10 metros, aunque es posible ampliarlo) para que el trabajo resulte lo más cómodo y sencillo posible. 
  • Sulfatadoras de mochila: son, probablemente, las máquinas de sulfatar más eficientes y fáciles de usar.
  • Sulfatadoras para tractor: hay distintas posibilidades en este caso, todas ellas orientadas a optimizar el trabajo de fumigación mediante tractor. Según la potencia del vehículo y el terreno en cuestión, elegirás una u otra.
  • Sulfatadoras para desinfección: en los últimos tiempos nos hemos dado cuenta de lo importante que es la limpieza y la desinfección de los espacios. Por eso, el empleo de sulfatadoras para eliminar patógenos ha crecido de forma considerable.

No es sencillo decirte con seguridad qué tipo de sulfatador te conviene comprar para tu caso particular. Aparte de saber con exactitud cuáles son tus necesidades y las características de tu terreno, hay otros factores que van a hacer que la balanza se decante hacia uno u otro lado.

¿Qué tener en cuenta antes de comprar un sulfatador?

Ya has podido comprobar, al conocer los distintos sulfatadores que existen hoy en día, lo complejo que puede llegar a ser este mundo. Rodearse de expertos es, en este sentido, la mejor idea para minimizar el riesgo de error y maximizar la calidad de los resultados. Precisamente como expertos que somos, queremos contarte ahora qué otros factores tienes que tener en mente cuando estés intentando elegir una máquina de sulfatar.

En primer lugar, tenemos que hablar de la bomba, ya que la presión que esta es capaz de ejercer la convierte en un elemento crucial. Podemos encontrarnos con muchos tipos de bombas diferentes, cada una con sus ventajas e inconvenientes, según el uso que le quieras dar a la máquina.

Para que tengas una visión general, las que más se utilizan son las bombas de pistón y las bombas de diafragma. Las primeras se usan para conseguir presiones altas, de hasta 150 pascales. Pero, como inconveniente, no son útiles para cualquier producto. Por ejemplo, las soluciones en polvo humectable no son compatibles.

En cambio, las bombas de diafragma no llegan nunca a superar los 60 pascales, pero a cambio aceptan una gama mucho más amplia de productos de fumigación.

El siguiente elemento en el que te debes fijar al elegir una máquina sulfatar son los accesorios de pulverización y su compatibilidad con la herramienta. Hablamos, por ejemplo, de las varillas aplicadoras o lanzas pulverizadoras, así como de las boquillas encargadas de rociar el líquido y repartirlo por todo el terreno.

Se trata de elementos también muy importantes. Las varillas, concretamente, sirven para mantener cierta distancia entre el usuario y los productos químicos que se estén utilizando para fumigar, que pueden ser tóxicos y dañinos en muchos casos. 

Las boquillas, por su parte, se instalan al final de la lanza y sirven para controlar el flujo y los patrones de pulverización. Puedes elegir rociar en forma de cono, abanico, chorro ancho o directamente. Y puedes escoger entre tener un caudal menor, de 0,25 gpm (el mínimo), o uno mayor, de 0,5 gpm (el máximo).

La mayoría de los modelos admite varios tamaños, formatos y extensiones de estos accesorios, pero es necesario que compruebes antes de hacer la compra que los que acepta tu fumigadora son los que después vas a necesitar.

Por su parte, la ayuda o el soporte lumbar que vas a requerir durante la realización de los trabajos de pulverización también va a determinar el tipo de máquina de fumigar que es mejor que adquieras. Ya sea por tu estado físico o por el tamaño del propio terreno, no cualquier sulfatadora te va a convencer igual.

Asimismo, otro punto a analizar también relacionado con la carga es la capacidad del depósito. Seguro que sabes que no es lo mismo soportar 16 litros que 25. Especialmente, si tienes por delante una larga jornada de trabajo en tu jardín.

Por último, la seguridad es otro aspecto que no deberías infravalorar al invertir en una máquina de sulfatar. Tapas, correas, cerraduras o protectores de gatillo son algunos elementos de seguridad que no pueden faltar. 

Los hay más o menos grandes, más o menos ajustados o más o menos eficaces. Hay que analizarlos también muy bien para elegir los más adecuados. No en vano, pueden ser vitales para evitar accidentes, que no son del todo infrecuentes al usar las máquinas de sulfatar.

Entonces, ¿qué pulverizador debes comprar?

No cabe duda de que todas las sulfatadoras cumplen las mismas funciones: regar las plantas, protegerlas o curarlas con tratamientos fitosanitarios y fertilizar los cultivos. Para todo ello puedes aprovechar las ventajas de tu sulfatadora, pero no todas cumplen con su labor de la misma manera, como has podido imaginar si has leído hasta aquí. 

La pregunta, entonces, es sencilla: ¿qué máquinas de sulfatar son las más idóneas en cada caso? Para responder a esta cuestión, primero has de concretar en cuál de estas situaciones te encuentras:

  1. ¿Necesitas trabajar en entornos comunitarios, como hospitales, residencias o comunidades de vecinos? Elige las sulfatadoras eléctricas, que son mucho más silenciosas y no molestarán a nadie.
  2. ¿Estás buscando la herramienta perfecta para sulfatar rincones complicados? En medianeras de árboles y arbustos, esquinas o recovecos de altura, las sulfatadoras manuales son tu opción.
  3. ¿Tu terreno es de grandes dimensiones o tiene una vegetación muy densa? No lo pienses demasiado y decántate por un pulverizador de gasolina con mochila.
  4. ¿Tu objetivo es librarte de los insectos o limpiar y desinfectar determinados espacios? Si es así, también deberías elegir una mochila fumigadora.
  5. ¿Tienes un espacio grande en el que trabajar, pero quieres minimizar al máximo el esfuerzo físico? Da un paso más y opta por una sulfatadora de gasolina con carretilla.
  6. ¿Vas a destinar tu máquina a trabajar de manera profesional una gran extensión de terreno? En este caso, merece la pena que inviertas en una sulfatadora para tractor, si ya cuentas con este vehículo.

Seguro que, llegados a este punto, tu conclusión es que no cualquier sulfatadora sirve para cualquier propósito. Es una máquina con unas funciones muy específicas, pero existen infinidad de modelos que varían considerablemente en cuanto a sus características esenciales.

Recuerda también que puedes complementar tu máquina de sulfatar con aquellos complementos o accesorios que terminen de hacerla perfecta para la labor que vas a llevar a cabo. Boquillas, lanzas, campanas para herbicidas, chorros orientables… todos ellos se convertirán en la guinda del pastel de tu pulverizadora.

¿Cuál es la mejor sulfatadora calidad-precio del mercado?

Te recomendamos las sulfatadoras que más vendemos y que tienen más acogida por los usuarios de nuestra tienda online dadas sus elevadas características de precio y calidad:

Sulfatadora de batería mochila Synergy 16 L 12v con 4 boquillas y 6 horas autonomía

Mochila de sulfatar de gasolina Kuda 25cc 20 litros 11 kg

Mochila sulfatadora de líquido y polvo Kuda, 42cc

Carretilla Sulfatadora Gasolina Synergy. 50 litros. 30 kg.

Consejos de seguridad y mantenimiento

Una vez elegido el pulverizador, llega el momento de pasar a la acción. Aquí tienes algunos consejos que creemos que te serán de mucha utilidad:

  • Llena el depósito únicamente hasta donde indique la señal.
  • Evita pulverizar producto sobre flores, animales, personas u objetos eléctricos.
  • Si hace viento o calor, pospón la pulverización.
  • Utiliza los elementos de protección (guantes, gafas, cascos…) que indique el fabricante.
  • Vacía el depósito y despresuriza y limpia el pulverizador tras cada uso.
  • Almacena tu máquina en un lugar fuera del alcance de los niños y en el que la temperatura ambiente se sitúe entre 5 y 30 grados.
  • Aplica regularmente aceite en las partes móviles de la máquina.