Ahoyadoras

Tipos y usos de ahoyadoras

Desde hace décadas, las ahoyadoras forman parte de la maquinaria agrícola y de jardín más práctica y funcional que puedas adquirir, porque permiten perforar en superficies sólidas o semisólidas con resultados óptimos y reduciendo las horas de uno de los trabajos más duros de realizar. Hacer hoyos puede parecer una tarea sencilla, pero si el objetivo es realizar un número considerable, el ahorro de tiempo que supone contar con una ahoyadora implica optimizar el esfuerzo.

Reforestar, plantar árboles frutales, hacer los hoyos necesarios para clavar los postes del cercado de una finca, huerto o parcela, crear un muro vegetal de arizónicas en un jardín o cavar hoyos para la fertilización de raíces... son algunos de los usos frecuentes en los que las ahoyadoras permiten llevar a cabo un trabajo perfecto, con hoyos del diámetro exacto y con la profundidad requerida en cada caso. Potencia, seguridad y facilidad de uso son tres características que hacen que comprar una ahoyadora sea siempre una excelente inversión.

Junto a las manuales, en la actualidad, tienes ahoyadoras eléctricas, de uso limitado al necesitar estar conectadas a una fuente de energía restando autonomía en el trabajo y ahoyadoras de gasolina, las más potentes y versátiles. Los modelos que te presentamos cuentan con motores de 2 tiempos de eficiencia máxima, ideales tanto para un uso intensivo profesional, como para pequeñas labores en el jardín. Con una relación calidad – precio inmejorable, las ahoyadoras de gasolina combinan: rapidez y precisión en cada trabajo, peso reducido, comodidad en el manejo y gran autonomía, para que puedas utilizarla en grandes extensiones de terreno durante horas.

Elementos básicos de una ahoyadora de gasolina: ¿en qué fijarte?

Las ahoyadoras de gasolina son máquinas resistentes y fiables que cuenta con un motor, de cilindrada determinada, que envía la fuerza necesaria a la broca helicoidal con la que la máquina ahoya la tierra sin que la persona que la maneja tenga que ejercer fuerza alguna. Basta con sujetar la empuñadura ergonómica y arrancar la ahoyadora para que ésta funcione como un gigantesco taladro que penetra en el terreno dando forma al hoyo que necesitas en cuestión de unos minutos.

Entre los detalles que hay que tener en cuenta a la hora de adquirir la herramienta que más se adapte al tipo de trabajo que realizas con mayor frecuencia destacan:

• Motor. Es lo que hace de las ahoyadoras de gasolina las más potentes resolviendo con eficacia cualquier trabajo, incluso en las superficies más duras o en terrenos difíciles por su inclinación o por la presencia de capas especialmente resistentes al horadado. Los modelos que rondan los 3CV de potencia pueden con todo y hacen fácil cualquier tarea.
• Brocas. Son el elemento clave de las ahoyadoras, ya que de su resistencia y capacidad de penetración dependen sus resultados. Las que te ofrecemos vienen equipadas con brocas de distintos diámetros y longitudes para que siempre tengas a mano la que te va a permitir hacer el hoyo perfecto.
• Depósito. Con depósitos de capacidad superior al litro y sistemas que maximizan el ahorro de combustible, las ahoyadoras de gasolina pueden estar en funcionamiento durante largos periodos con total fiabilidad.
• Mango ergonómico con cómodo acceso a los elementos de control de la máquina, sistema de arranque rápido y suave, ligereza y fácil transporte son también aspectos importantes que destacan en los modelos de ahoyadoras de las mejores marcas.